
Los especialistas de la Investigaciones y del Sernageomin que trabajan con la ljueza Virgina Rivera informaron que en el sector de la quebrada del río rapel, las tierras son "vírgenes", es decir, no habrían registrado movimientos, por lo que la posibilidad de encontrar indicios sobre las víctimas sería prácticamente nula. A pesar de ello, continúan escavaciones en terrenos indicados por el coronel (r) Andrés Magaña Bau.
En una quebrada del sector trabaja la Brigada en Asuntos Especiales de Derechos Humanos de la Policía de Investigaciones. (11:00 hrs.)
Según el coronel en retiro, Andrés Magaña, en este lugar se habrían enterrado los restos de 17 personas, todas ellas detenidas la noche del 16 de octubre de 1973, en la ciudad de Paine.
Los peritajes todavía están en su etapa inicial y en medio de un completo hermetismo por parte de la magistrada Virginia Riveros Álvarez.
El objetivo es impedir que se filtre la ubicación exacta del sitio donde, según la declaración de Magaña, los 17 detenidos habrían sido fusilados y enterrados. Aún no hay nada concreto, por lo que las organizaciones de derechos humanos llaman a la cautela.
Si bien muchos tienen la esperanza de encontrar algún resto de sus familiares, la excavación recién está comenzando.